Las dos opiniones más emotivas que he recibido: ¡brutales!

Opinión de J. de Castellón:
He leído “El psicólogo de Nazaret” y me ha gustado mucho. Me resulta difícil poner en palabras lo que ha supuesto la lectura del libro... He estado tirado en la cama toda una semana, sin poder levantarme, sin fuerzas y fíjate si estaba mal que no he sido capaz siquiera de cambiarme de ropa interior en toda la semana. Estaba realmente mal y se puede decir que llegó un punto en el que toqué fondo. Pensaba que lo mejor sería quitarme de en medio y dejar de sufrir. Sí, pensé en suicidarme, porque todo son problemas, que si le debes dinero a este proveedor, que si no pagas al otro porque la cosa está muy mal y tantas y tantas cosas... Fue en esos momentos cuando de forma providencial me dio por coger tu libro y mientras lo leía me sentía identificado con Cristina, con sus sentimientos... A medida que iba leyendo empecé a darme cuenta de que todo lo que escribes en el libro es verdad y estás cargado de razón, aunque no sea fácil aplicarlo. Sin embargo puedo decirte que me ha ayudado muchísimo, tanto que gracias a tu libro empecé a ver las cosas de otra manera. Me di cuenta que había puesto frente a mí todos mis egoísmos que no me dejaban ver más allá y poco a poco fui recuperando mi confianza. Me ayudó a salir del pozo en el que estaba hundido, a ver la vida de otra manera, a seguir viviendo... ¡La luz volvía a mi vida!
Es un libro francamente bueno y ya lo he recomendado a dos personas y te aseguro que voy a seguir recomendándolo porque tiene muchas y buenas enseñanzas, es muy entretenido y puede hacer el mismo bien que me ha hecho a mí. Muchísimas gracias y enhorabuena.

Opinión de Maria Luisa de Madrid:
Apreciado amigo Antonio Gargallo. Siento haber tardado en darte mi opinión, un accidente familiar muy desagradable, que roza la tragedia me ha bloqueado, pero gracias a leer "El Psicólogo de Nazaret", estoy lentamente recuperándome... ¡Gracias por tu inspiración! Le pido al año nuevo 2013 que Dios te proteja y siga inspirándote para llegar a nuestro corazón y, en mi caso, al alma; en mejor momento no podía haber leído tu libro, no una sino varias veces y releerlo me da fuerzas para continuar... Cuando piensas que todo está perdido, algo o alguien te da fuerzas y alas para continuar. "Dios y tú, sois mi recuperación"...
En mis momentos buenos, he regalado en Navidad y Reyes tu libro y... me asombran, cuando me lo agradecen tanto, en mi caso les digo que el autor eres tú y te deseo el mayor de los éxitos, porque te lo mereces... Faltan más personas como tú, o dicho de otra manera: el mal hace mucho ruido y el bien pasa muy desapercibido, no es éste tu caso y te felicito por ello. Mi fe se tambaleaba y has conseguido que la recuperara. No sé cómo agradecértelo, sino deseándote lo mejor y... mucha inspiración, (aquí me reitero), para que sigas ilusionando, animando y... salvando vidas. Un abrazo muy fuerte y "que Dios te bendiga amigo".